Cómo calafatear una ducha en 3 sencillos pasos

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Independientemente del tipo de ducha que tenga, sellar las juntas y las esquinas es una tarea crítica para evitar que el agua entre por debajo de la superficie, lo que genera un entorno favorable para el crecimiento de moho o incluso dañar la estructura de la pared. Para asegurarse de que el agua no se filtre a través de las juntas, debe inspeccionarlas con regularidad y volver a aplicar masilla nueva según sea necesario. Las siguientes secciones son una guía paso a paso sobre cómo calafatear una ducha.

Los 3 pasos para calafatear una ducha

Lo primero es lo primero, las herramientas y los materiales que necesita para calafatear su ducha son:

1. Retire la masilla vieja

Si desea renovar el sellador que ya tiene, primero debe quitar el anterior. Puede rasparlo con un raspador de afeitar o una herramienta para quitar masilla. Asegúrese de limpiar todas las superficies que entrarán en contacto con la masilla, incluidas las baldosas, los paneles de las paredes, la superficie de la bañera, las juntas de las válvulas de la ducha e incluso el brazo del cabezal de la ducha. Las sobras de masilla se pueden quitar fácilmente con una herramienta oscilante o un cuchillo para raspar tanto como sea posible.

La masilla no se adhiere a la superficie a menos que esté lisa y limpia; Para que sea más fácil, también puede aplicar un quitaesmalte líquido. Si encuentra moho o hongos, elimínelos con limpiadores comerciales o combine una parte de lejía con dos partes de agua. Use una esponja y un limpiador doméstico para limpiar todas las superficies de masilla y enjuáguelas con un paño o trapo húmedo. Antes de aplicar la masilla nueva, asegúrese de que todas las áreas estén completamente secas.

2. Establezca límites con cinta adhesiva y luego aplique silicona

Puede aplicar masilla usando un tubo, pero una pistola para masilla de calidad puede ser de gran ayuda porque puede manejar fácilmente el flujo y la dirección de la masilla, lo que da como resultado una línea de mejor apariencia. Si es la primera vez que carga la pistola de calafateo, asegúrese de no cortar demasiado la punta porque una abertura grande soltará demasiado calafateo, lo que resultará en líneas muy gruesas.

Antes de comenzar el proceso real, use cinta de pintor para cubrir la superficie al lado de la cuenta. Luego, comience a calafatear aplicando presión sobre la pistola. No existe una técnica correcta o incorrecta al calafatear: puede sostener la pistola a 90 grados o empujarla hacia adelante o hacia atrás desde su punto de partida. Use el método que lo haga sentir cómodo, para no hacer un trabajo descuidado.

3. Eliminar el exceso

Una vez que llene los espacios con sellador, limpie la línea con su dedo mojado para quitar cualquier exceso. Esto también ayuda a redondear la cuenta y suavizarla. Mientras la masilla aún está húmeda, retire la cinta y luego continúe con la siguiente sección de la ducha. Una vez que termine, asegúrese de esperar 24 horas antes de usar la ducha nuevamente.

Calafatear una ducha no es un proceso difícil. Aún más, es imprescindible si desea proteger su hogar del moho y los hongos. Una vez que practique varias veces, el calafateo no debería tomar mucho tiempo, por lo que no necesita llamar a un profesional si sigue los pasos anteriores.